El Gobierno regional anuncia la supresión del Consorcio del PEAG (Enlace noticia en Lanza)
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Lanza
Domin Villarejo
Alcázar de San Juan
La consejera de Agricultura recordó que el PP ha sido crítica con el Plan Especial del Alto Guadiana, “porque veíamos que no iba a resolver muchos de los problemas de la zona”- Además, de entrada, “yo rechazo ese plan en su premisa, porque pretende reducir a la mitad la superficie de regadío del Alto Guadiana y no quiero eso. Además es un plan, que no se ha cumplido, ni en los presupuestos, ni en los proyectos. Ni ha llegado agua, ni ha llegado el dinero que decían que tenían que llegar”.
Soriano aseguró que este gobierno está resolviendo, “lo que otros no han resuelto, los expedientes de regularización de pozos, los 8.000 expedientes que estaban todavía sin resolver por el Consorcio de Gestión del PEAG, que para nosotros es un órgano, que no tiene ninguna razón de ser”.
En este sentido, la responsable regional dijo que, “en estos momentos, no tiene razón de ser la duplicidad de organismos y, por tanto, se suprimirá el Consorcio y las gestiones que se tienen que hacer, se repartirán entre la Confederación Hidrográfica del Guadiana y la Consejería de Agricultura”. Ambas administraciones serán la encargadas de resolver los expedientes que tendrían que estar resueltos desde mayo de 2009.
Por otra parte, la Consejera señaló que en Castilla-La Mancha, en pleno siglo XXI aún hay municipios a los que hay que llevarles agua en cisternas en verano y ha aseguró que desde el gobierno regional se está trabajando para resolver los problemas derivados de la “nefasta gestión hidráulica que se ha llevado a cabo en los últimos 30 años”.
Soriano afirmó que “el agua marca la diferencia entre una agricultura competitiva y una de subsistencia”, por eso dijo que hay que garantizar el agua potable pero también el agua para la agricultura y la ganadería porque “el futuro de Castilla-La Mancha está en el campo”.
Del mismo modo, tras defender un Pacto Nacional del Agua como herramienta para disfrutar de agua en cantidad y calidad, recordó que “el agua es un bien público y no una mercancía para venderla a cambio de un puñado de votos”.
Soriano precisó que las líneas generales de la Política del Agua de la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, está basada en la seriedad, el realismo y la sostenibilidad, y ha apuntó que se está trabajando para resolver y desarrollar un Plan de Infraestructuras que sitúe a esta región donde se merece en materia de regadíos. En este sentido, señaló que Castilla-La Mancha cuenta solamente con un 14 por ciento de regadío del total de cultivos de la región; un porcentaje muy lejano al de otras comunidades autónomas que, según dijo, han llevado a cabo una mejor gestión en materia agrícola e hidrológica, como la Comunidad Valenciana, que tiene un 45 por ciento de regadío; Murcia, con un 38 por ciento; Andalucía, con un 25 por ciento; o Aragón, con un 23 por ciento.
Esto es importante, matizó, porque los cultivos de regadío son cuatro veces más rentables que los de secano, permiten diversificar los cultivos, contribuyen al desarrollo de las industrias agroalimentarias y fijan la población en el medio rural.
De hecho, aseguró, la densidad de población es de 26 habitantes por kilómetro cuadrado en zonas de regadío, mientras que baja hasta los diez en las de secano.
Por último, afirmó que: “disponemos de los medios y tenemos agua suficiente, pero hay que saber distribuirla y llevarla a donde hace falta”.
En este sentido aseguró que los criterios que defenderán tanto el Gobierno de España como el de Castilla-La Mancha en materia de agua serán los de unidad de cauce, sostenibilidad, solidaridad entre territorios y preferencia de la cuenca cedente, entre otros. “Con estos criterios podremos garantizar el agua para todos los pueblos”.
Alcázar, un referente
El alcalde, Diego Ortega, indicó que Alcázar “ha sido y sigue siendo un referente en materia de agua” porque además de ser el corazón de la Reserva de la Biosfera ‘La Mancha Húmeda’, también cuenta con la mayor empresa municipal de Aguas de toda Castilla-La Mancha, que este año cumple su vigésimo aniversario. Señaló que “por convicción, por responsabilidad y por ideales”, acoger esta jornada “era un deber moral” y apuntó que este evento convierte a Alcázar en “epicentro de la región en materia de agua y en altavoz de la sociedad respecto a un recurso que no sólo es esencial para la vida, sino también para el desarrollo de los pueblos”.
El alcalde señaló que en un momento como el actual, es básico analizar la situación del agua, profundizar en los retos que se plantean e intentar aportar ideas que ayuden a encontrar soluciones eficaces y sostenibles, y aseguró que “ésta debe ser una tarea en la que todos los agentes sociales nos impliquemos”.
Por último, Diego Ortega indicó que en materia de agua “es fundamental no dar palos de ciego, como se ha hecho en otras ocasiones, sino establecer estrategias y políticas serias y firmes, que nos ayuden a gestionar mucho mejor los recursos hídricos existentes y a garantizar el abastecimiento de las poblaciones y los diferentes usos del agua”, y añadió que “sólo así estaremos en condiciones de seguir avanzando y progresando”. Asimismo, apuntó a la necesidad de poner la ciencia y la conciencia al servicio del agua. La primera, empleando las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías para favorecer una gestión eficiente y de calidad; y la segunda, para sensibilizar a los ciudadanos y a los gestores de los recursos hídricos.
Visión global y soluciones
La jornada se convocó con el objetivo de ofrecer una visión global de la problemática del agua y debatir posibles soluciones para conseguir una gestión más eficiente. A la misma asistieron alrededor de 150 personas, entre Autoridades, técnicos, asociaciones, Comunidades de Regantes y agricultores.
Entre los ponentes, cabe destacar la presencia del presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, José Díaz Mora, quien participó en una mesa redonda sobre: ‘La gestión del agua en Castilla-La Mancha’ en la que también participaron; el senador y portavoz de la Comisión de Agricultura en la Cámara Alta, Carlos Cotillas; el presidente de la Red Castellano-Manchega de Desarrollo Rural, Ángel Exojo; y la presidenta de la Comunidad de Regantes del Acuífero 23, Araceli Olmedo. En ella se habló del Plan Especial del Alto Guadiana, de los criterios que debería contener el Pacto Nacional del Agua, de los acuíferos, de extracciones y de concesiones, entre otras muchas cosas.
La jornada, a la que asistieron la diputada nacional Carmen Quintanilla; el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha, Santiago Lucas-Torres; alcaldes y concejales de toda la comarca, tuvo tres ponencias.
En la primera, el gerente de la Empresa Municipal ‘Aguas de Alcázar’, Ángel Puente, disertó sobre la gestión del Ciclo Hidráulico Urbano y la política de dicha empresa; en la segunda, el presidente honorífico de la Asociación Española de Abastecimiento y Saneamiento de Agua, Gaspar Cienfuegos-Jovellanos, habló de los retos y necesidades de la gestión del agua; por último, Luis Babiano, gerente de la Asociación de Operadores Públicos de Abastecimiento, incidió en el modelo público en la gestión del agua.