Molinos

En el término de Villafranca de los Caballeros había tres molinos de viento y seis de agua. Los de viento eran: el del tío Zoilo, el del tío Roque y el que ocupaba el espacio de la actual ermita de San Isidro. Los del agua eran: Harinero, Doctor, La Guerrera, Cazuelas, Vadancho y el molino nuevo. Todos ellos situados en el río Gigüela en el orden en que han sido enumerados, de sur a norte.

Cada molino era construido paralelo al río a cierta distancia con una base de sillería, sobre la que se erigía la casa con materiales menos duraderos. Generalmente piedra y argamasa o manpostería que después se enlucía con yeso y cal, aunque en las esquinas u otros sitios estratégicos se podían usar algunos sillares. En la base se daba forma a dos o más pozos conforme se iba levantando, según la cantidad de piedras de moler que fuera a tener el molino, destinados a albergar las turbinas. Estos pozos recibían el agua cerca de la parte superior y la desaguaban por la inferior, por lo que las compuertas de entrada de agua se situaban en la parte delantera del molino muy por encima que las ventanas de desagüe en la parte trasera. Por la misma razón, el canal llamado ladrón que se practicaba paralelo al río para llevar agua al molino, tenía menos hondura en su tramo de absorción de agua que en el tramo de salida. Esa cualidad necesaria del molino requería que la base fuera bastante alta y por lo tanto costosa, por lo que algunos molinos en origen eran subvencionados por el Priorato de San Juan y entregaban a este parte de su producción. En algunos casos, como en el molino del Doctor, los molinos tenían hasta tres piedras de moler con sus tres pozos de turbinas. Pero el río no siempre llevaba suficiente agua como para mover todas las piedras, por lo que según el estado del mismo se debía decidir si llevaba agua para una piedra, para dos o para tres. Esto se conseguía mediante la manipulación de las compuertas de entrada. Aunque lo normal es que el ladrón fuera paralelo y estuviera a uno de los lados del río, el Gigüela al ser un río de poca pendiente formaba a veces islas en el medio del río. Este es el caso, nuevamente, del Doctor; en el que el río rodea al molino por este y oeste, mientras que el ladrón lo atraviesa por el centro.