- Cabalico: persona que hace las cosas con perfección, cabalmente, como debe ser o está estipulado.
Amorgolla un poquito más y no seas tan cabalica.
Persona que llega a un sitio de forma inoportuna y molesta para los que están allí.
Mia qué cabalico ha tenío que llegar a enterase de to.
- Caballerico: cómodo, sentado cómodamente.
Anda que no te lleva caballerico tu padre en el carro.
- Cacero: cazador.
- Caer un pelao o una pelona: significa que ha helado debido a las bajas temperaturas, caer una helada o un hielo.
¡Menudo pelao va a caer esta noche!
- Cagaico: muy parecido a sus progenitores.
Tie dos chicos cagaicos a su suegro.
- Cagueta: diarrea, cagalera, deposición líquida. Antes las gastroenteritis se llamaban «caguetas», estar con cagueta o cagalera.
- Caida: riña amistosa, juego de niños.
¿Echamos una caida?
- Caido: aborto, feto o embrión abortado.
- Cagüenrós: interjección que se usa para denotar contrariedad, cuando algo no nos sale bien, como nosotros esperamos.
¡Cagüenrós! To la mañana escribiendo pa na.
- Cajón: cagajón, excremento de las caballerías. También se le llama cajonera.
- Calambuco, carambuco: según el DRAE, es un tipo de árbol; para nosotros es un bloque de hormigón vibrado, de gran tamaño y color grisáceo, rectangular y hueco, que se usa generalmente para construir cercas en los solares.
- Calcamonía: calcomanía, tatuaje.
- Calcañal: «calcañar» es la parte posterior de la planta del pie; por extensión, llamamos así al agujero del calcetín que se hace en esa parte del mismo.
Menudos calcañales ties en los calcetines, estos precisan de remiendos.
- Caldereta: es un guiso de cordero, pero para nosotros es un caldero grande de zinc donde nos bañaban y japoteaban nuestras madres cuando no teníamos cuartos de baño en las casas.
- Caliche: juego tradicional. Sobre un palo clavado en el suelo, se colocaban unas monedas. Desde cierta distancia, los participantes lanzaban sus rullos para derribar el palo y las monedas. Ganaba el rullo que se quedaba más cerca de las monedas.
- Callejuela: calle corta y normalmente estrecha, con entrada por uno solo de sus extremos, cerrada con una portá. Generalmente dan a ella las traseras de las casas cuyas fachadas están orientadas a calles más importantes.
Ves abriendo las portás de la callejuela, que ya van viniendo los carros.
- Camisón: camisa de hombre, además de prenda para dormir.
- Campano: vaso muy grande y muy lleno.
¿Ese campano te vas a beber?
El DRAE contempla otros significados.
- Candao: parte de tierra entre dos cepas de viña que queda sin arar al hacer los surcos en la almanta y que se arará después, al hacer los surcos en la otra perpendicular.
- Candil, candilero, candileja: tajada cercana al rabo del conejo, formada por dos partes o huesos iguales.
Las tres palabras tienen otros significados en el DRAE.
- Canear: pegar, dar palos, aplicar una paliza.
Que te caneo como contestes así, sinvergüenza.
El DRAE lo contempla como sinónimo de encanecer.
- Cano: persona albina o muy rubia, con el pelo casi blanco o canoso. A los albinos también los llamamos jaros.
- Cantos, los: entretenimiento de los niños que consistía en lanzar uno su canto en el suelo y el siguiente en alcanzarlo. No tenía más terminación que el tiempo que tardaban los participantes en cansarse o aburrirse, ni tenía premios ni castigos.
- Cañamones: brotes en forma de ramilletes de las flores de la oliva antes de abrirse.
¡Osten to los cañamones que tien hogaño las olivas!
- Capá: gran cantidad de rosa del azafrán que sale en una noche.
Hoy ha habío una buena capá.
- Capellazo: cargo que se hace a una persona sola cuando la responsabilidad es de varias; por ejemplo, cuando, a la hora de pagar lo consumido en un bar, se van todos y queda sólo uno para pagar, se dice que éste «carga con el capellazo».
- Capirucho: no sólo lo usamos para referirnos al capirote o capuz (cucurucho sobre la cabeza y los hombros) que llevan los penitentes en Semana Santa, sino también al penitente en sí.
Este año llevaba el Sepulcro muchos capiruchos.
También, mal dicho, los llamamos «caripuchos». Igualmente, por la forma cónica, llamamos «capirucho» a los cucuruchos para golosinas, hechos con papel.
- Caramucano: borracho, muy bebido. También usamos como sinónimo la palabra calata.
Estaba un poco caramucano en Nochevieja. Anoche me acosté calata y me dormí vestío y to.
- Carillana: parte del corte de la siega, formado por diez o doce lomos.
- Carne huida: zona golpeada y luego dolorida durante días. Puede salir moratón o no. También se llama así en otros lugares.
- Carpón: manojo de carrizos laguneros que se ponían debajo de las tejas lomeras al hacer los tejados.
- Carrera: hilera de rosa del azafrán en una suerte, además del recorrido de la procesión del Cristo del 15 de septiembre. El DRAE contempla esta última acepción como cualquier recorrido procesional, mientras que nosotros sólo la usamos para referirnos al mencionado anteriormente.
Tengo promesa de ir to la carrera descalzo.
- Carreterín, el: es una carretera pequeña, pero para Villafranca, «el carreterín» es el que va desde la carretera de Quero a las lagunas.
- Carrigüela: correhuela, mala hierba.
- Carrillo: polea.
Engrasa el carrillo el pozo, que chilla.
- Cartulina: almanaque, calendario.
Anda, Esmeraldo, dame una cartulina pa saber a cuántos estamos.
- Casas de paso: eran antiguas casas de vecinos, grandes, siempre con las puertas abiertas, con amplios patios, que comunicaban en su longitud una calle con otra y la gente las utilizaba como paso, para acortar camino. Por ejemplo, para ir de la calle de la Parra a la calle de Herencia, se pasaba por la casa de la Antonia (y otros dueños. Es la de al lado de la Casa de los Galipos), se cruzaba el callejón de los Galipos y se atravesaba la casa de la tía Margarita (antiguo horno de Santiago). Había varias en el pueblo conocidas y usadas por todos.
- Casa encamará: se mantiene la expresión para indicar que tiene dos plantas, pues antes, en la parte superior se hacían las cámaras para almacenar aperos de labranza y cereal y se destinaba la baja a vivienda y cuadras, sobre todo, en las casas de labor.
- Cascabiles: uñas del cerdo.
- Cascañetas: castañuelas.
- Casi to gaseosa: expresión que indica irónica sorpresa, tanto para bien como para mal, como ¡Total niebla!.
Casi to gaseosa, la casa que se han hecho.
- Casilla: casa pequeña de campo, con dos departamentos separados por un tabique de poca altura: uno para las personas, donde están la chimenea y los camastros, y otro para las caballerías, con pesebres, para hacer noche en el campo o para guardar los aperos de labor.
Se están hundiendo todas las casillas del término.
- Casilleta: quiosco.
Cuando vayas a la plaza, cómprame el periódico en la casilleta.
Caseta de las ferias (de tiro, tómbola).
Me he ganao un mono en la casilleta del tiro.
- Casporra: grosor del azafrán, en relación con el estigma, «boca» o «cabeza» del pistilo (azafrán) de la rosa, ensanchamiento de la parte superior de las hebras. Decimos que el azafrán no tiene casporra cuando es muy fino y delgado.
- Casquera: conversación molesta, locuacidad, verborrea (verbosidad excesiva), parloteo.
Cállate ya, que me estás poniendo la cabeza loca con tanta casquera.
Para nosotros no es la señora que vende productos de casquería. El DRAE contempla «cascar» como charlar. La persona que casca mucho es una cascanta; si es hombre, cascante.
- Cata: rebanada de pan untada o mojada con algo como pisto o giniebla. Si se hace con la orilla de un pan (hogaza), hay que sacarle la miga para que sea una cata de pocillo y poder rellenarla, normalmente con tomate.
Me he comío una cata tomate. Me he comío una cata vino y azúcar.
- Cautín: soldador, pieza de cobre con que los «lañâores» fundían el estaño para tapar los agujeros de las vasijas que restauraban, tras calentarlo entre brasas.
- Cebolla: en general, bulbo de una planta. Nosotros lo concretamos en el bulbo de la rosa del azafrán.
- Cellajo: señal que deja en la piel una prenda cuando aprieta mucho.
Quítate esos calcetines, que te estarán haciendo cellajo.
- Cenceña: torta que se hacía con masa de pan a la cual se le añadía un poco de aceite y se volvía a amasar para mezclarlo bien, se le ponía unos cañamones por encima y se horneaba.
- Censo: persona cargante y pesada, cosa molesta para alguien. Lo decimos por extensión de su significado real, «impuesto o tributo».
Más valiera que buscaras trabajo, que menudo censo estás hecho.
- Centella: enfermedad de la cebollao bulbo de la rosa del azafrán. El diccionario la contempla como enfermedad del trigo.
Vamos a tener que sacar la suerte porque se ha acentellao la cebolla.
- Ceomo: la expresión correcta es «ecce homo», por alusión a la que dijo Pilatos, cuando presentó ante el pueblo judío a Jesús apaleado y ensangrentado. Por extensión, nosotros la usamos (una sola palabra) para decir que una persona, vaya ensagrentada o no, va muy mal vestida, con andrajos.
Vino hecho un ceomo.
- Ceporrudo: adjetivo que usamos como sinónimo de basto, tosco, gordo.
No uso móvil porque tengo los dedos mu ceporrudos.
- Cerrâera: cerradera en el DRAE es «lo que cierra»; para nosotros, el último surco grande que se echa en la almanta para terminar la labor de arado.
- Chache/chacha: los usamos para referirnos a los hermanos mayores o a los tíos.
Me he ido con mi chache al cine.
- Chafe: corte, cortadura, raja en la piel.
Me he hecho un chafe abriendo un almendruco.
- Chaleca : se aplica a la persona que, como parte de su carácter, utiliza el lenguaje con segundas intenciones y mucho retintín (rintintín en Villafranca), mujer de gran personalidad.
Seguramente, la Chela era un poco chalequeja.
- Chambergo, chamberga: es una prenda de un antiguo uniforme militar. En Villafranca lo usamos coloquialmente como chaqueta o abrigo.
Hoy me he puesto el chambergo porque ya hace frío.
- Chapar: alicatar, colocar azulejos.
Ya han terminao los albañiles de chapar la cocina.
- Chas: mulas.
Voy a echales un pienso a las chas.
Se usa en otros pueblos cercanos.
- Chaspescar, chaspiscar: ir muy deprisa.
Con las voces que había allí, no me extraña que se fueran chaspescando.
- Chasponazo: para nosotros, calambrazo, chispa eléctrica; para el DRAE, señal que deja algo duro en la piel al pasar rozándola.
¡Menudo chasponazo pegaron los plomos cuando se fundieron!
- Chato: aunque en algunos sitios también se llama así, generalmente se conoce esta fruta como paraguaya, paraguayo, melocotón paraguayo o paraguaya chata.
Échame dos kilos de chatos.
- Cheches: «sabor» (dolor) que dejan en la cabeza los cocones, capones o picarotes.
¡Osten! Me ha sabío a cheches el cocón del maestro.
- Chela, La: la muy Leal y Fiel Villa de Villafranca de los Caballeros, como recuerdo a una vieja «conocida» nuestra, antigua mesonera, supuestamente llamada la Chela. Por eso, nuestro gentilicio es igualmente villafranquero o chelero.
- Chelero: gentilicio, villafranquero, natural de Villafranca de los Caballeros, La Chela.
- Cherpa: paliza, tocata.
- Chiburre, chiburrín, chiburrajo: pequeño, sobre todo, refiriéndose a los niños cariñosamente.
He tenío una nieta, más chiburrina...
- Chicharrones: además de los trozos que quedan una vez derretida la manteca del cerdo, con los que se hacen las tortas de chicharrones, son trocitos de pan frito (picatostes) que se ponen para acompañar las migas y otros platos. En el diccionario son trozos de carne fritos, para acompañamiento.
- Chile: voz que utilizamos para llamar a los perros.
Cho, chile, ven acaquí, verás lo que tengo.
- Chillerizo: parte del interior del cuello del cerdo, entre la boca y el esófago o gorguero, de donde salen los «chillidos» del cerdo.
- Chinero: contemplado en el DRAE como mueble para guardar los objetos de china (porcelana), también llamamos así a la parte de cuero del tirador (tirachinas) donde se coloca la piedra para lanzarla.
Antes de atar la goma al otro lao del tirador, habrá que meter el chinero.
- Chinforrera: construcción de campo para albergar animales y personas, entre el silo (totalmente excavado en la tierra) y la casilla (construida sobre el terreno). Se excavaba una parte y sobre los laterales se construía un techo abovedado, y constaba normalmente, como la casilla, de dos estancias: una cocina con camastros para las personas y una cuadra para los animales.
- Chinostra: cabeza.
- Chiringuito: casa vieja o corral donde las pandillas de amigos se reúnen cuando hay varios días de fiesta (feria, carnaval y navidades).
El día 12 tiene que estar ya preparao el chiringuito, limpio y con las bebidas pa la feria.
- Chochá: conjunto de chochos o semillas de pipa, calabaza, melón… o gran cantidad de hijos.
¡Menuda chochá han juntao!
- Chocho: además de la vulva de la mujer y el altramuz, contemplados en el diccionario, en Villafranca son las semillas en general recubiertas por pulpa o cáscara, como el hueso o cuesco de las aceitunas, las pipas o los cacahuetes.
Me he tragao el chocho de una acituna.
También se llama así a las bolitas fritas de la roscutrera.
He hecho roscutrera y me han sobrao muchos chochos.
- Chocolate, del: regalo de mala calidad, como si nos hubiera tocado con las fundas del chocolate o en la tómbola.
Me ha traido mi padre una máquina de retratar del chocolate, pero me vale.
- Chori: pintalabios.
- Chorrilás: berriás producidas por algo que gotea o chorrea.
Pero, ¿cómo traes esas chorrilás?
«Chorro» de cosas. Forma de defecar los cuquillos desde su nido (sacando el culo y echando una «chorrilá»).
- Chuchar: comer, en general. El DRAE sólo lo contempla como usado en Nicaragua, sinónimo de realizar el coito.
Esta noche me han chuchao los mosquitos.
- Chupetá: chupetada, chupada, lametada. Calada a un cigarrillo.
Anda, déjame que le dé una chupetá a tu helao.
- Chupón: carámbano, además de vástago innecesario en las olivas (DRAE).
- Chuponar: quitar los chupones (brotes innecesarios) a las olivas. También se dice eschuponar o simplemente quitar chupones.
- Ciazo: cedazo, harnero.
- Cibanto: desnivel pronunciado entre las lindes de las tierras o entre las tierras y el camino. También lo llamamos acirate.
- Ciezo, sieso: persona de carácter frío y seco en el trato social.
¡Pus ándate un sieso que estás hecho, que no saludas a nadie!
- Cigarro: rosa del azafrán al amanecer, cuando todavía no se ha abierto. Igualmente lo llamamos cobollo.
Los cigarros se mondan mu mal.
También le damos el significado, por extensión, de tiempo de descanso en la jornada de vendimia, para beber agua, «echar un cigarro»…
Hoy, como nos vamos de mudá, no hay cigarro.
- Cilantro: culo, también llamado seto.
Menudo cilantro está echando con tanto comer.
Realmente es una planta.
- Cimencera: sementera, tiempo destinado a la siembra del campo.
- Cinguerreteo: ruido que hacen las puertas al abrirlas y cerrarlas muchas veces y sin cuidado.
No cinguerretés tanto cuando te vayas, que está el niño durmiendo.
- Cinta: raya gris, marrón o azul que se pintaba en la parte inferior de las paredes encaladas, en el ángulo con el suelo.
Lo último que se hace en el jalbiego es recortar la cinta.
- Cirio, el: juego tradicional, variante de la vidalga, en el que pueden jugar más participantes que en ésta y las varas o palos utilizados son más pequeños. Las reglas del juego son prácticamente las mismas.
- Cirote: heces, excrementos de consistencia considerable y bien retorneados. La palabra correcta contemplada en el DRAE es «cerote», mezcla de pez y cera que usaban los zapateros.
- Cita: referido a una persona, provocador.
¿Cómo no te va a pegar tu hermano, si tú eres un cita?
- Civiles: sardinas «salás».
- Clara del mediodía: durante los días de lluvia, cese de ésta durante ese periodo de tiempo.
- Clavo: cada uno de los tres estilos del pistilo de la rosa del azafrán, por su semajanza con un clavo, al tener la «cabeza» o estigma un poco más grueso que el resto de la hebra.
Mira, ha salido una rosa doble, con seis clavos.
Contemplado en el DRAE.
- Cobollo: cogollo en general. Pero más concretamente nos referimos con este término al cigarro o cogollo de la rosa del azafrán, cuando ésta no se ha abierto todavía.
- Cobrar: recibir golpes y palos. No está contemplada en el diccionario con este significado, pero se usa mucho en España.
O te bajas de ahi o cobras.
- Cocío de vendimia: guiso a fuego lento y en crudo, parecido a un pisto manchego, con ajo, cominos, cebolla, aceite, pimientos y mucho tomate. Se le añade una pizca de azúcar para contrarrestar la acidez del tomate.
He comprao pimientos y tomates pa hacer un cocío.
- Cocón: golpe en la cabeza, normalmente con poca fuerza o intensidad.
Osten, qué cocón me dao con el armario.
- Codâora: codadura, parte del sarmiento tendida en el suelo,de donde se levanta la vid.
- Codrío: terreno de tierra negra, áspera, seca, de ínfima calidad.
- Coger: recoger rosa del azafrán. No está contemplado en el diccionario con este significado, pero se usa igual en otros lugares.
Se fueron a coger esta mañana los chicos y el padre.
- Coger compases: estar pendiente de una conversación, enterándose de todo, pero sin participar en ella.
- Coger el dos: irse, marcharse de un lugar.
Esto es lo que hay; y, si no, coges el dos.
- Coger el toletole: irse, marcharse de algún lugar.
Discutimos y cogió el toletole.
También se dice en pueblos de alrededor por andar deprisa.
- Coger una liebre: mancharse mucho por haberse caído en un charco o en el barro.
Con tanta lluvia, no está la calle más que pa coger una liebre.
Se dice en otros lugares de la zona.
- Colâor: recipiente de barro parecido a una tinaja, aunque más estrecho y con boca ancha, que se usaba para guardar el pan.
- Colorín: muchacho de poca envergadura y gran agilidad encargado de subirse a la parte más alta de la oliva, por el interior de ésta, trepando por el tronco y las ramas principales, para varear la aceituna de las últimas ramas, a las que no se alcanza desde fuera del árbol.
- Comodín: mueble del dormitorio, especie de cómoda pequeña.
Tráeme las gafas del cajón de arriba del comodín de mi cuarto.
- Condenarse: enfadarse mucho interiormente, sin exteriorizar la ira o la rabia que algo nos produce. No tiene nada qe ver con las condenas impuestas por los jueces ni con la condenación eterna en términos religiosos.
Es que me condeno cuando oigo to las tontás que dice.
- Cono: tinaja grande que sirve de depósito para el vino en las bodegas.
- Conocimiento, con: además de todas las acepciones que da el diccionario, nosotros lo usamos como sinónimo de cuidado y precaución.
A mí, la coliflor y lo verde, con conocimiento.
- Contao, al: hacer las cosas de inmediato, con diligencia y premura.
Cuando suene el timbre, sales al contaico.
- Contenta: propina.
Les he dao a los camareros una contenta pa las Pascuas.
- Contrapear: el DRAE lo contempla como poner dos piezas de madera con la veta cruzada, nosotros lo extendemos a cualquier cosa que se coloque o vaya en sentido contrario.
Coloca las tejas contrapeás pa que no se caigan. A ver si nos ponemos de acuerdo, que vamos contrapeaos.
- Corbetera: tapa de puchero o de olla. El diccionario contempla «cobertera» como tapa en general para distintos usos.
- Coronilla: parte superior del trompo o peonza, que se pintaba con azafrán si no se disponía de otra cosa para darle color.
- Corraleta: cerca de paredes pequeñas en el entorno de la casilla donde se echaba la basura y se hacían las necesidades del cuerpo.
- Corralillo, el: pequeño cementerio, adosado al otro en su lado norte (detrás de la ermita de san Juan), donde se enterraba a los suicidas, por «no merecer camposanto».
- Correo: autocar, autobús. Mantenemos su uso porque antiguamente era en ese medio de transporte donde llegaba el correo(correspondencia) propiamente dicho. Se usa en otros lugares.
Me voy a Toledo en el correo de las ocho.
- Corretaje: cotilleo, comentario hecho a espaldas del afectado, alcagüetería.
Ya ha venío la tía Carmen con el corretaje de unos y de otros.
- Corrucanero: persona con pocas propiedades, como, por ejemplo, una pequeña viña.
Ya están los corrucaneros vendimiando lo suyo.
- Corte: trabajo, quehacer, faena.
Me han salío tres cortes en Madrí.
Tarea pendiente de acabar.
Yo aquí de casquera, con el corte de jalbiego que tengo en mi casa.
Marca por donde llega lo que queda por hacer de una tarea.
-¿Ande está el corte? -Mira el moño y desde ese liño p´acá.
- Cortecho, a: forma de segar cuando no se podía hacer bien la carillana por estar tumbada la mies a causa de su gran altura y peso o por haber llovido, es decir, todos los segadores trabajaban a la par, uno al lado del otro, «a cortecho».
- Cortezón: corteza del pan.
No puedo comer cortezón porque está mu duro.
- Coscorro: en el diccionario aparece «coscurro» (trozo de pan duro) y «cuscurro» (de corrusco, parte del pan más tostada en los bordes). Para nosotros es cualquier trozo de pan duro, restos de pan de días anteriores.
Tanta hambre tengo, que me comería aunque fuera un coscorro.
- Cota: roña, suciedad, sobre todo, en las partes prominentes del cuerpo (codos, rodillas, nudillos…)
Mete los pies en remojo pa quitate to la cota de los tobillos.
- Coyotes: helados fabricados por Guillermo, de forma cilíndrica y con palo.
- Cristalina: canica de cristal.
- Cruces, las: via crucis que se rezaba en la ermita del Cristo al día siguiente del entierro, por el alma del difunto, haciendo catorce paradas en otras tantas cruces colocadas en las paredes.
Voy a las cruces de mi vecino Antonio.
- Cruzabarbecho, a: ir de mudá o a algún sitio en el campo sin respetar lindes ni caminos, sino cruzando las tierras por donde mejor venga. También utilizamos la expresión a tronchagalgos.
Vamos mejor a cruzabarbecho pa tardar menos.
«A cruzabarbecho» se usa en otros lugares.
- Cruzar: cavar superficialmente el terreno de la suerte para que esté «mullidico» y libre de malas hierbas.
- Cuajar: imaginar o idear una maldad o travesura y llevarla a cabo.
Ojo, María, que no se le cuaja una buena a tu chico.
- Cuarta: juego de niños, consistente en lanzar una moneda (negrina) a un determinado lugar y tirar los demás participantes las suyas, con el fin de tocar la primera, en cuyo caso se decía «picá y hecha, doble» y el «tocado» tenía que pagar doble prenda (normalmente santillos), o acercarlas a menos de una cuarta (distancia entre el dedo pulgar y el meñique o el anular, montando sobre éste el meñique). Si el lanzador lo conseguía, el primero tenía que pagar una prenda.
- Cuatro esquinas, las: juego tradicional en el que eran necesarios cinco participantes para que cuatro de ellos pudieran ocupar sendos árboles y el quinto quedarse en el centro. Éste se acercaba a uno de los ocupantes de los árboles y le decía: «Dame una poquita lumbre», a lo que el otro debía responder: «En aquella casita que reluce». Aprovechando que el del centro se encontraba de espaldas, los otros tres tenían que intentar cambiar de árbol, pero si era más rápido el que se quedaba y encontraba un árbol libre, el «desposeído» ocupaba su lugar y empezaban de nuevo.
- Cucás: juego de niños en el que el que se quedaba dejaba el trompo en el ronde marcado y los demás participantes lanzaban con fuerza los suyos para intentar romperlo con los rejos.
- Cuchará y paso atrás: expresión que se usa en muchos sitios para indicar la forma de comer cuando se reúne una cuadrilla alrededor de un recipiente común para todos, ayudándose con un cantero de pan debajo de la cuchara, en la mano contraria, para que no se desperdicie ni se manche nada.
El mojete de vendimia se come a cuchará y pasoatrás
- Cuestas, en: en Villafranca no cargamos nada «a» cuestas, sino «en» cuestas, sobre las espaldas.
Estoy arriñoná de llevar al crío en cuestas.
- Cuezo: recipiente rectangular de madera usado por los albañiles para amasar el yeso. No está incluido en el diccionario pero se usa también esta palabra en otros sitios como «meter el cuezo», meter la pata.
- Culá: patada en el culo que se da al que se retira pronto del juego, sin causa justificada para los demás participantes.
Como no juegues, te damos la culá.
Golpe dado con el culo (DRAE) o caída hacia atrás, de culo.
Me he escurrío y me he dao una culá.
- Culebrillas: juego infantil que consiste en saltar de un lado a otro de una cuerda que se mueve por ambos extremos a ras del suelo, simulando culebras en movimiento.
Aquí jugamos a las culebrillas, que no hay barro.
También llamamos «culebrillas» a los rayos.
Parece que va a haber nube, que se ven culebrillas por Alcázar.
- Cuquera: agujero en general. Viene de «cuco», gusano.
Menuda cuquera está haciendo el perrete en la paré.
- Cuquillo: el diccionario dice que es lo mismo que un cuclillo, pero para nosotros es una abubilla, que es un pájaro distinto. El cuclillo es casi negro y la abubilla (cuquillo), rojiza, con un penacho negro y blanco, como las alas.
- Curiosa: se dice de las mujeres limpias en demasía, no de las que demuestran un especial interés por algo, ni de las dadas al cotilleo. Podemos utilizarla tanto para elogiar como para criticar.
Anda, no seas tan curiosa y vámonos al cine.